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Nota: Aunque lo parezca, este no es un post sobre videojuegos, o al menos no pretende serlo.

Hace un par de semanas salió a la venta Call of Duty: Modern Warfare 2, el juego más esperado del año y que ha batido récords de ventas en sus primeros días en el mercado. Al empezar a jugar me llama la atención una advertencia, que dice que ciertas fases del juego pueden herir mi sensibilidad, que si las quiero desactivar. Le digo que no, que uno ya ha estado en muchos lugares peliagudos y terminó por perder los escrúpulos dos Call of 'Duties' más trás.

Soy un iluso. En una de sus primeras fases el juego te sitúa en la piel de un soldado americano infiltrado en la banda de un terrorista. Y entonces, con poco tiempo para pensar, la banda en la que estás infiltrado comete una masacre brutal, asesinando a inocentes, civiles y policías. El shock que se produce en el jugador es tremendo, al menos en mi ha sido asi. Existen infinidad de juegos donde mueren civiles, pero la mayoría de las veces con un tono casi de chiste como en la saga Grand Theft Auto. En esta ocasión la escena es cruda y realista. Por tanto, allí se encuentra el jugador, en medio de la sangre y los cadáveres, sin saber muy bien qué hacer. Una de las virtudes de esta fase es que el jugador puede tomar la decisión de participar o no del baño de sangre. Luego, en un segundo acto de esta dantesca obra de teatro, el jugador tiene que matar a los 'buenos' si quiere que el juego continúe, un pequeño precio que hay que pagar para poder seguir con la historia. El final, desalentador, nos hace reflexionar sobre la atrocidad en la que acabamos de participar.

Ya se han desatado polémicas en distintos países sobre esta escena, siendo en algunos casos censurada. En mi opinión es posiblemente la escena más bestia, por decirlo de alguna manera, que he visto en un videojuego, aunque genera más desasosiego que violencia.

Nota: Este enlace te lleva directamente a una noticia sobre este tema, pero cuidado, que hay spoilers.